Un plan de gestión de residuos le permite a la empresa llevar a cabo acciones lógicas y eficaces para gestionar desechos. De esta manera pueden aprovechar mejor sus recursos y cumplir con las normas establecidas en la ley del país. En las próximas líneas te explicamos en qué consiste y cómo se establecen sus objetivos.
¿Qué es un plan de gestión de residuos?
En pocas palabras, un plan de gestión de residuos es un documento emitido por las empresas. En dicho plan se establecen las condiciones, medios, acciones y características que se van a llevar a cabo para los residuos generados por la actividad industrial propia.
Además de un plan a seguir, en este documento también deben manifestarse las previsiones necesarias para disminuir la generación de desechos. Para esto, se hace una lista con las medidas preventivas, mejoras en las instalaciones y costos implicados en este proceso.
En el caso de las empresas que generan residuos peligrosos, deben contar adicionalmente con un permiso para su actividad. Por otra parte, el plan de gestión de desechos debe incluir la seguridad del personal involucrado.
Objetivos de un plan de residuos
En el plan de gestión de residuos de cualquier empresa debe especificarse cuál es el objetivo que se desea alcanzar. No basta con indicar que quieren disminuir la contaminación, también debe abarcar su productividad y desarrollo. Por ejemplo:
- Mejorar el funcionamiento de la compañía.
- Reducir costes en la producción gracias a la reutilización y el reciclaje.
- Mejorar los procesos productivos, enfocándose en aprovechar al máximo los recursos y materias primas.
- Reducción o eliminación de los desechos producidos.
- Disminuir el impacto ambiental ocasionado por la actividad económica.
- Garantizar la salud y bienestar de los trabajadores.
- Mantener en buen estado las instalaciones de la empresa.
- Cumplir con todos los requisitos establecidos en la Ley el medio ambiente.
- Gestionar adecuadamente los desechos, incluso si no representan un riesgo.
Estos adjetivos pueden ser establecidos por la misma empresa generadora de desechos. Sin embargo, también pueden ser indicados por un gestor autorizado, quién se encarga de ofrecer asesoría a las empresas.
Pasos para realizar un plan de gestión de residuos
Es difícil señalar un único plan de gestión de residuos para todas las empresas, porque cada una genera desechos diferentes. Pero en términos generales, los pasos que deben seguirse son los siguientes:
Paso 1: Identifica que residuos se producen
Cada empresa debe identificar y calcular qué residuos y en qué cantidad se generan. Después de esto entonces pueden utilizar una clasificación de desechos para medir su peligrosidad y saber cómo manejarlos
Paso 2: Establecer las leyes y protocolos aplicados a cada caso
La Ley establece una forma de proceder adecuada para cada tipo de residuos, por lo tanto, las empresas deben seguir estás indicaciones. La normativa puede tener ámbitos sociales, comunitarios o autónomos, por lo que la empresa debe conocer qué ley se aplica al caso.
Paso 3: Realizar un registro y seguimiento
El plan de gestión de residuos de todas las empresas debe contemplar un registro y seguimiento de los desechos. Es decir debe reflejar el momento de retirada de los desechos y el tipo de residuos que se genera.
De igual forma, debe asegurarse de que se han cumplido cada uno de los objetivos previamente establecidos. Esto abarca la protección del medio ambiente, seguridad de los trabajadores y la optimización de los procesos industriales.
Paso 4: Realizar acciones para verificar la integración en el proceso de este plan
Una vez que se ha hecho un registro y un seguimiento del plan, el paso siguiente consiste en analizar los puntos débiles. De esta forma se pueden evaluar las acciones memorables y el alcance de cada uno de los objetivos.
¿Por qué es importante la gestión de desechos?
Casi todas las empresas productivas o industriales generan residuos en el desarrollo de sus actividades comerciales. Estos desechos se acumulan en el medio ambiente y pueden generar problemas de salud pública.
Por otra parte, los recursos demandados por las empresas se toman directamente del entorno natural. La tasa de recuperación del medio ambiente es inferior en comparación con su explotación, por lo tanto se genera un desequilibrio.
La gestión adecuada de los desechos permite devolver al ambiente aquellas sustancias degradables. Además, facilita el uso y reciclaje de otros materiales, prolongando su vida útil y disminuyendo el uso de recursos no renovables.
En pocas palabras, un plan de gestión de residuos busca que una empresa aproveche sus recursos de forma inteligente. Así se puede lograr un equilibrio entre la actividad económica de la sociedad y el medio ambiente que nos provee materia prima.
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